Esta es la ruta de Interrail de 15 días por tres de los países más verdes e interesantes de Europa de Anna para Mochileros de viaje. Visitó algunos de los pueblos más bonitos del sur de Alemania, prosiguió por Austria para divisar los Alpes y acabó este viaje tan especial entre cascadas y lagos suizos.
Para hacer esta ruta utilizó un pase de Interrail de 7 días en un mes. Fueron más de 1.800 km y una veintena de trenes utilizados, ya que se aprovecharon los días incluídos en el pase para hacer más de un viaje en tren al día y se añadieron 5 trenes fuera del pase para aprovechar al máximo la aventura.
¿Quieres conocer el detalle de su ruta? Sigue leyendo.
Ruta de Interrail de 15 días por Alemania, Austria y Suiza
Día 1: Basilea – Friburgo – Heidelberg
Llegada a Basilea en un avión procedente de Barcelona. El aeropuerto tiene salidas para ir a la parte francesa y la alemana. Nos desplazamos hasta la estación de tren y sellamos el primer punto del abono del Interrail para ir hasta Friburgo, una ciudad de 220.000 habitantes. Está considerada una de las capitales de la Selva Negra, el gran y espeso bosque al sur de Alemania. Visitamos el centro y entramos en la Catedral.
Por la tarde tomamos un tren con destino de Heidelberg. Se trata de una bonita ciudad de coloridos edificios barrocos. Recorremos la Haupstrasse, la calle más larga de Alemania. Subimos al funicular que nos llevará hasta el Castillo de Heidelberg, una fortaleza parcialmente en ruinas desde donde tendremos unas bonitas vistas de la ciudad. Dormimos en Heidelberg.
Día 2: Selva Negra
Madrugamos y cogemos el segundo tren hasta Triberg, a 56 kilómetros de Friburgo. Para llegar tenemos que cambiar hasta 3 veces de tren, por lo que es muy recomendable llevar instalada la app Rail planner, la aplicación oficial de Interrail que muestra horarios y rutas también sin necesidad de tener conexión a Internet.
Este pueblo está situado en el corazón de la Selva Negra. Pagamos los 3,50€ que cuesta el acceso al camino que nos llevará a las conocidas Cataratas de Triberg. Durante buena parte del recorrido caminamos en paralelo al río Gutach y entre espesos árboles. No tenemos mucho tiempo para hacer un trekking más largo, puesto que hay que regresar a Heidelberg.
Día 3: Rottenburg
Salimos desde Heidelberg en dirección a Rottenburg ob der Tauber. Este es uno de los pueblos de estilo medieval más pintorescos de Alemania. Las casas son preciosas, con picudos tejados y coloridas fachadas. También hay parte de una muralla y se conservan los antiguos accesos a la ciudad. El lugar más reconocible es la intersección entre la Sieber-Tower y la Kobolzeller-Tower. No hay un sitio más de postal que éste.
Por cierto, a este pueblo también se le conoce como “el pueblo de Pinoccho”, puesto que la película de Disney se inspiró Rottenburg para recrear la historia de uno de los mentirosos más conocidos. Tras la visita al pueblo, subimos al tren y seguimos la ruta hasta casi al anochecer para llegar a Núremberg.
Día 4: Núremberg
Dedicamos todo el día a visitar otro de los lugares más bonitos de Alemania. En invierno, este es el destino más popular si quieres visitar los famosos mercadillos navideños. Visitamos el bonito caso histórico. Esta población fue un lugar importante para artesanos y eso se nota en cada detalle de la ciudad.
Pero Núremberg también es conocida por ser el lugar en el que el régimen nazi organizaba sus grandes desfiles. Tras la II Guerra Mundial, allí también se celebró el macro-juicio más famoso contra dirigentes del partido nazi.
En la ciudad todavía se conservan algunos puntos simbólicos del nazismo, como el Campo Zeppelin, el campo de desfiles diseñado por el arquitecto Albert Speer (uno de los juzgados en el Jucio de Núremberg). Si os interesa la historia, una visita recomendable es la Centro de Documentación en el Antiguo Terreno de Congresos del Partido Nacionalsocialista, un gran museo que explica de forma cronológica el auge y derrota del III Reich.
Día 5: Múnich
Dejamos atrás Núremberg y nos desplazamos en tren hasta la capital de Baviera. Nos acercamos hasta la fachada del Ayuntamiento en la MarienPlatz para ver a las 12:00h cómo las figuras del carrillón se mueven. Esta danza apenas dura 1 minuto y puede que en otras épocas fuera súper espectacular, pero hoy sabe a poco.
Caminamos por el centro y nos acercamos hasta el Vitualienmark, un popular mercadillo de frutas y verduras, pero también de comida gourmet, que normalmente se llena los topes de gente. Hay diversos puestos de comida y bebida. De hecho, la comida es una de las cosas más recomendables de la ciudad (aparte de la cerveza, por supuesto). Podrás encontrar platos de carnes y salchichas tradicionales por diferentes puntos y a relativo buen precio.
Día 6: Neuschwanstein
El castillo más fotografiado de Alemania (que ya es decir debido al gran número de castillos que hay en el país) fue la gran obra en vida de Luis II, también conocido como el “Rey loco”. Admirador del renacimiento, de leyendas medievales como Tristán e Isolda y mecenas de Richard Wagner, al acceder al trono decidió dejar los asuntos de estado al parlamento para dedicarse a su gran pasión: impulsar la construcción de grandes castillos en homenaje a sus inquietudes artísticas. Neuschwanstein fue la joya de la corona.
Para llegar a Neuschwanstein se puede ir en bus, pero para visitar el castillo se requiere reserva con bastante antelación, especialmente si vas en primavera, ya que muchos alemanes también aprovechan esta época para visitarlo.
Si te has quedado sin poder comprar los tickets para el castillo (evita las colas en la puerta, pueden ser de hasta 3h) la mejor opción es contratar el tour que se vende en la Oficina de Turismo de Múnich (54€) y que incluye la visita al castillo, al palacete de Linderhof y al pintoresco pueblo de Oberammagau. Los tickets para esta excursión de ida y vuelta pueden comprarse hasta las 18:00 del día anterior a las visita en la oficina de información situada al lado de la estación principal de Múnich.
Sólo pueden visitarse algunas salas del castillo, puesto que por dentro nunca se llegó a terminar. Sin embargo, el exterior se ha convertido en uno de los símbolos de Alemania. Imprescindible.
Día 7: Múnich
Empezamos el día con un tour de la empresa Sandeman. Esta empresa realiza visitas guiadas gratuitas en las que al final del trayecto puedes dar el monto que quieras (o no) al guía. Visitamos la Hofbräuhaus, la cervecería más famosa de la ciudad fundada en 1589. Es un lugar enorme, de diversas plantas, y donde es fácil ver a ciudadanos vestidos con el traje tradicional bávaro tomando cervezas de más de medio litro.
Por la tarde visitamos el Museo de la Ciudad. Es visita muy interesante para conocer la historia de la peculiar región de Baviera. Por la tarde subimos a lo alto de la torre de la Catedral de Múnich. Desde allí podréis ver una de las mejores vistas.
Día 8: Kufstein y Hall in Tirol
Entramos en Austria para ir hasta Kufstein, la segunda ciudad más importante del Tirol. Visitamos la hermosa fortaleza de la ciudad, el castillo y recorremos el centro histórico por la calle principal.
A continuación, tomamos otro tren para llegar hasta Hall in Tirol. Esta bonita ciudad está rodeada de montañas y cuenta con un agradable casco antiguo medieval. Visitamos la Iglesia de San Nicolás y la capilla de Santa Magdalena. Cogemos el último tren el día y llegamos al atardecer para dormir en Innsbruck, la perla del Tirol.
Día 9 y 10: Innsbruck
La capital del Tirol tiene muchos puntos interesantes para visitar. Por este motivo, es muy recomendable comprar la Innsbruck Card (39€ – 24h/48€ – 48h). Esta tarjeta incluye la entrada gratuita a todos los museos de la región, un viaje de ida y vuelta con los funiculares, e incluso un paseo a bordo de un bus turístico. También puedes alquilar una bicicleta durante 3 horas.
Durante el primer día visitamos el Tejadillo de Oro, el monumento más emblemático de la ciudad. Tal y como su nombre indica, se trata de un tejado dorado construido por Maximiliano I en conmemoración de su boda con Bianca Maria Sforza. También visitamos el magnífico Palacio Imperial, la Igelsia de la Corte (donde está el cenotafio más importante de occidente), el Archivo Histórico y el Museo de Arte Popular de Tirol para ver la mayor colección cultural de esta bucólica región.
El segundo día subimos con el funicular Innsbrucker Nordkettenbahnen y llegamos hasta lo alto, donde hay un impresionante mirador a más de 2.000 metros. Desde allí se puede ver una magnífica vista de los Alpes, e incluso según la temporada, los picos nevados.
Día 12: Zúrich
Madrugamos y cogemos el tren para entrar de nuevo a Suiza. Se nota el alto nivel de vida del país, los precios son bastante más altos y hay bancos por todos lados. Visitamos el centro y damos una vuelta hasta llegar al gran lago de la ciudad. Desde ahí parten a menudo diversas barcos que lo navegan.
Por la tarde cogemos otros tren en dirección a Winterthur, el lugar donde dormiremos las tres próximas noches.
Día 13: Cataratas del Rhin
Para llegar hasta las cascadas debemos de pagar un tren extra no incluído en el Interrail. Antes de llegar, paramos en Stein am Rhein, una ciuda a orillas del lago Constanza. El acceso principal al casco antiguo se realiza a través de la Puerta Undertor. De nuevo, nos encontraremos un bonito pueblo medieval de grandes casas y coloridas fachadas.
Proseguimos el viaje en tren hasta llegar a Schaffhaus. En ese lugar el río, uno de los más caudalosos de Europa, cae por una espectacular catarata. Es todo un espectáculo ver como el agua baja con toda su fuerza. Hay varios miradores por la zona. Tras pasear por la zona, volvemos Winterthur.
Día 14: Lucerna
Lucerna es otra pequeña ciudad situada en el centro de Suiza. Sí, como muchas otras ciudades también tiene un lago. Este es uno de los lugares más tranquilo del viaje. Un lugar perfecto para relajarse. Aquí accedemos al centro de la ciudad medieval a través de un bonito puente de madera, el Puente de la Capilla. También visitamos la muralla de la ciudad.
Los edificios de esta ciudad son realmente bonitos, con fachadas decoradas con muchas pinturas. Otro punto destacado de la ciudad es el Monumento del León, que no es más que un león esculpido sobre una gruta. Esta será nuestra última noche en Winterthur.
Día 15: Basilea
El inicio y final de esta ruta antes de volver a Barcelona. Esta ciudad universitaria que cuenta con más de 40 museos destaca por la gran plaza del mercado y el suntuoso Palacio municipal. Con la Baselcard obtendrás descuentos del 50% en la mayoría de museos de la ciudad. El Kuntsmuseum es uno de los más recomendables. El precio de una hamburguesa de McDonald’s aquí es de 15€.
Si quieres cruzar el Rhin a su paso por la ciudad hay 4 transbordadores. Las vistas del Rhin al atardecer pusieron fin a este viaje en Interrail por el corazón de Europa.
2 comentarios
Que viaje más bonito. Lo has montado genial la verdad, me encantaria hacerlo, cuanto te has gastado en todo más o mnos?
Hola Johanthan! El presupuesto fue de unos 1300€. El pase Global Pass costó 242€+70€ vuelo Barcelona-Basilea. En zonas como Suiza el precio de comer y dormir es bastante caro y si quiere ahorrar es mejor dormir en hostels. Saludos