Un viaje a Tailandia es el sueño de muchos mochileros. Playas de aguas cristalina, selva, arquitectura exhuberante, deliciosa gastronomía street food, trekkings entre etnias del norte, snorkel con peces exóticos… El país tiene casi todo lo que un viajero busca y puedes hacértelo a tu medida sea cual sea tu presupuesto.
En 2017 tuve la oportunidad de visitarlo 15 días tras recorrer Myanmar durante dos semanas. El contraste no pudo ser más brutal.
Mientras que Myanmar empieza a desarrollar una incipiente infraestructura turística y la gente recibe de forma muy cálida a los turistas, Tailandia es un bullicio constante de turistas. Hay lugares realmente impresionantes, pero también hay mucha gente que quiere verlos. Si quieres fiesta, búscala. Si prefieres calma tendrás que evitar lugares saturados.
A continuación, puedes consultar los artículos con información detallada de nuestra ruta tailandesa. A destacar en el norte Sukhothai, un bonito jardín arqueológico, y la estancia de 2 días en el santuario de elefantes Elephant Nature Park en Chiang Mai, las playas y la calma de la isla de Koh Tao y por supuesto Bangkok y sus alrededores.
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