Empezar una aventura en Interrail en un ciudad a la que no llegan los trenes puede parecer un sinsentido. Pero al diseñar nuestra ruta, Duvrovnik era una ciudad a la que no podíamos renunciar. Croacia es un destino en auge en Europa por su costa adriática, accesible a precios algo más económicos que la costa mediterránea.
Nada más llegar a Dubrovnik te das cuenta de que es una ciudad pequeña, fácil de recorrer a pie y cuyo máximo reclamo turístico es el casco antiguo amurallado, de época medieval. Este pasado atrajo a los productores de Juego de Tronos y la ciudad es actualmente uno de los escenarios reales más reconocibles de la serie. Muchos fans acuden para recorrer alguna de las rutas temáticas que recorre varias localizaciones.
La ciudad sufrió muchos desperfectos durante la guerra de los Balcanes. Fue bombardeada y la mayoría de los tejados entre murallas quedaron en ruinas, aunque hoy lucen plenamente reformados. La puerta de Pile es el punto de acceso al casco antiguo.
A unos metros de la puerta se encuentra uno de los numerosos accesos a la murallas que rodean esta parte más antigua de Dubrovnik (100 kunas por persona, 13 euros aprox.). Las vistas desde lo alto hacen que la visita merezca realmente la pena. Durante un buen rato estuvimos paseando sobre un recorrido que en ocasiones pasa muy cerca de los tejados de las casas. También hay trozos en los que hay espacio suficiente como para sentarte en un algún pequeño bar a tomar algo. La parte más impactante es la suroeste, con murallas levantadas sobre los acantilados y desde donde hay buenas vistas tanto de la ciudad como del Fuerte de Lovrijenac, uno de los escenarios de Juego de Tronos. Una entrada bajo las murallas en este punto acceder a una pequeña cala entre rocas donde hay mucha gente tomando el sol o tomando una copa.
Dentro del casco antiguo
Una vez visitada la ciudad sobre las murallas nos acercamos a la calle Stradun, la vía principal del casco antiguo, llena de tiendas, bares y mucha gente si coincides con la marabunta procedente de alguno de los cruceros por el mediterráneo con parada en Dubrovnik. Escondida al principio de la calle, pudimos ver la que es la tercera farmacia más antigua de Europa.
Ya al final de la calle Stradum llegas a la Plaza de la Luza, una de las más bellas de la ciudad, donde están la Torre del campanario y el Palacio del rector, edificio que fue la antigua sede de la república independiente de Ragusa y que actualmente también es uno de los puntos históricos más importantes de la ciudad. A partir de aquí, merece la pena callejear por toda la zona (eso es lo que hicimos) para ir descubriendo pequeñas plazas y callejuelas.
Atardecer en el puerto viejo
Tras andar y andar por las calles entre murallas salimos y nos acercamos al puerto viejo, a al lado de la puerta de Pile. Un lugar tranquilo, sin agobios y realmente espectacular entre las murallas y la fortaleza de Lovrijenac.
Desde ahí nos despedimos de la ciudad y nos fuimos a la estación de autobuses para ir a nuestro próximo destino croata: Split
Gastos del día
- Ticket para visitar las murallas: 100kn/13 €
- Comida + bebida fast food (fuera de la ciudad amurallada): 32kn/4,50 € Dentro de la ciudad amurallada el precio de un plato de espaghuettis ronda las 90kn/12€
- Taquilla para guardar la mochila en la estación de buses: 20kn/2,6€
- Bus del aeropuerto a la ciudad: 40 kn/5,25€
- Billete de 1 viaje en bus público: 12kn en taquilla, 15kn en el autobús/1,5-2€
- Billete de autobús Dubrovnik-Split: 135kn/17,71€