Si tu próximo destino es Croacia, este breve guía rápida te ayudará a viajar por un país en crecimiento gracias a la belleza de la costa adriática, y al animado ambiente de sus bares y cafeterías.
Alojamiento en apartamentos: Si eres de los que prefieres dormir en hostales para mochileros, en Croacia quizás debas replantear tus opciones. En ciudades costeras como Split o Dubrovnik, la mayoría de la oferta de alojamiento consiste en apartamentos turísticos regentados por particulares croatas. Con cocina, baño y un dormitorio, estos apartamentos tienen un precio bastante asequible (entre unos 40-50€ por noche) y no tienen un coste mucho mayor por persona que una habitación en un hostel. En Dubrovnik, es más caro dormir dentro en el casco antiguo, pero la ciudad es lo suficientemente pequeña como para que dormir en otra zona no te suponga un gran problema logístico. Hay varias líneas de autobús que paran frente a la Puerta Pile, la entrada al casco antiguo.
Gastronomía a precios accesibles: Croacia es un país de coste medio-bajo si lo comparamos con otros destinos de playa populares en Europa. Cenar o comer un plato sencillo te costará entre 6-10€ (a menos que estés dentro de la ciudad amurallada de Dubrovnik, donde los precios rondarán fácilmente a partir de los 12-15€ o más). En las ciudades más turísticas puede ser complicado encontrar restaurantes de auténtica cocina croata, vaya que más fácil comer una pizza que un plato típico del país. Si vas a Zagreb, no puedes perderte el menú del mediodía (6€) del restaurante Vallis Aurea. Buena cocina croata a precio accesible en la calle de la estación del funicular.
A Dubrovnik, por carretera o en avión (y muchos cruceros): La ciudad más turística que Croacia tiene un pequeño defecto: no tiene estación de tren. Así que si estás pensando hacer una ruta por el país, deberás llegar a Dubrovnik en autobús, en avión o en coche. El autobús en dirección a Split tarda cuatro horas y tiene varias salidas durante el día. Otra forma muy popular de llegar a Dubrovnik es a bordo de uno de los muchos cruceros que tienen parada obligatoria en esta ciudad, recientemente popularizada por la serie Juegos de Tronos. Si tienes la mala suerte de visitar la ciudad antigua el mismo día en que atraca un gran crucero, date una vuelta sobre la muralla para evitar multitudes.
Playas e islas en el adriático cerca de Split: Otro medio de transporte muy popular son los barcos que conectan la costa con las islas del adriático. El punto más popular de salidas de embarcaciones es Split. Tardarás poco menos de una hora en llegar a la población de Supetar, en la isla de Brác, la más cercana de todas ellas. Esta zona tiene playas muy accesibles para llegar andando. Por cierto, las playas croatas no son de arena fina, si no más bien de piedras. No olvides tus sandalias o chancletas.
Europeos sin euro: Croacia es un país miembro de la Unión Europea. Los ciudadanos europeos pueden entrar con DNI o pasaporte, mientras que si vives fuera de la UE necesitarás un visado. El país sigue teniendo su propia moneda, la kuna (1 euro – 7 kunas aproximadamente).
Un país ganas de fiesta: Si algo sorprende de Croacia es el animado ambiente de sus cafeterías y bares. Los croatas no parecen muy mediterráneos ni físicamente ni en lo cultural. Pero tienen ganas de fiesta y no es nada raro verlos abarrotando las cafeterías y bares un lunes por la tarde (al menos en verano).